Tranvía de Bilbao U-52

Coincidiendo esta semana con la celebración de las fiestas de Bilbao (Aste Nagusia) es un momento muy oportuno para conocer el tranvía U-52 que circuló por las calles de Bilbao entre 1923 y 1955.

Tranvía U-52 saliendo de la vía donde se guarda en el Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren

Este tranvía, junto con otros 6 (U-52 a U-57) fue construido por Carde y Escoriaza, en sus talleres de Zaragoza (actual CAF Zaragoza) en el año 1932. La caja es metálica, remachada y los ejes, donde se apoyan las ruedas y los motores, de marca Brill modelo E-79. El ancho original de vía en Bilbao, donde circulaba este tranvía, era de 1365mm. Con el paso del tiempo sufrió alguna modificación en cuanto al ancho de vía.

U-52 sobre una nevada que cayó el pasado 28 de febrero de 2018. Foto de Juanjo Olaizola

El interior posee 3 filas de asientos de madera, siendo una de ellas de una plaza y la otra de dos. Dichos asientos están enfrentados entre si, con la disposición de tertulia. Para prevenir al departamento de personas viajeras del frío se han instalado unas puertas correderas en ambos lados. Posee unos amplios ventanales practicables para permitir el paso de luz natural.

Interior. Departamento de personas viajeras

Las cabinas de conducción son muy sencillas y abiertas (no hay nada que las separe del resto de personas viajeras), tienen un combinador que acciona unas levas según esté el regulador accionado (los puntos de 0, donde se permite extraer el inversor, 5 puntos de serie y 4 puntos de paralelo que actúan sobre las resistencias de tracción) o, para verificar que el inversor está accionado hacia adelante o hacia atrás y, un manómetro para comprobar la presión de aire en las tuberías de freno.

Cuadro de mandos

El tranvía capta la corriente con una pértiga. Su tensión de funcionamiento tiene que ser de 500Vcc en catenaria (en aquella época carecían de dispositivos de seguridad que cerraban el disyuntor cuando la tensión subiese o bajase). Una vez ha conseguido captar la tensión de catenaria los disyuntores permitiendo el paso de corriente al combinador y, se puede empezar a circular. Además se permite el paso de aire para poder ser usando por los frenos, controlado por un compresor. El polo negativo se encuentra en el carril.

El Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren es el único que dispone de tranvías eléctricos en funcionamiento. U-52 de Bilbao con el 218 del Tranvía de Zaragoza

Este tranvía era asiduo a la línea 8, que como la actual línea de Euskotren tranbia Bilbo, unía Atxuri con el Hospital de Basurto, pero, lo hacía por Autonomía y San Francisco. La línea se cerró en 1955 y, dos años más tarde, este tranvía y su hermano el U-55 fueron transportados para Mallorca con el fin de formar parte del tranvía de Soller, un bonito ferrocarril que une la estación de Soller con el puerto, en Mallorca. Se puso un nuevo truck brill a cada uno para adaptarlo a la red del Soller, de 910mm. Su nueva matrícula en esta etapa, que duró hasta 1999, era el número 7.

Tranvía U-52 o uno de sus hermanos por Bilbao. Foto de Jeremy Wiseman. Guardada en el Archivo del Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren.

U-52 con una UT-400 de Euskotran o Euskotren Tranbia Bilbo en Pío Baroja. Foto, Juanjo Olaizola/Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren

Dado que en 1999 el Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren quería recuperarlo se hizo una permuta donde se trajo el tranvía U-52 y se llevó a Mallorca una locomotora Brown-Boveri sobrante de Euskotren. El motivo de la permuta fue que este tranvía y su hermano el U-55 eran los únicos que se conservaban del pasado tranviario de Bilbao. Gracias a la colaboración del gigante vasco CAF, empresa beasaintarra dedicada a la fabricación, mantenimiento postventa e ingeniería, dedicada al ferrocarril en su totalidad, a la empresa aragonesa Urbantram y a José María Valero y José Antonio Tartajo, dos expertos en la materia de importantísima consideración se procedió a su restauración. Se recuperaron los equipos de tracción y un truck Brill E-79 de 1000mm de ancho para que pueda circular por las instalaciones del Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren. Los motores, compresores y troles se recuperaron de la red de carris de Lisboa. El truck-brill se adquirió en un desguace y procedía de un vehículo de la serie 200 del tranvía de Valencia.

En el Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren se encuentra en el pabellón de cocheras, en la sección de transporte urbano

Actualmente permanece expuesto en orden de marcha en el Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren, sacándose de vez en cuando por la porción de vía que se dispone en las instalaciones con catenaria, de 500Vcc. En verano de 2008 volvió a circular por las calles de Bilbao para la filmación de la película Un poco de chocolate, basada en la novela Un tranvía en SP, de Unai Elorriaga, con la que su autor obtuvo el Premio Nacional de Narrativa en el año 2002.

Tranvía U-52 en Plaza Circular. Foto, Juanjo Olaizola/Archivo del Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren

Tranvía U-52 en Atxuri. Foto, Juanjo Olaizola/Archivo del Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren

Agradecer a Juanjo Olaizola, director del Museo Vasco del Ferrocarril de Euskotren, su colaboración al redactar este reportaje.